China amplía sus vínculos petroleros con Irak: The Diplomat
China es el mayor importador de petróleo crudo del mundo, importando más de 11 millones de barriles diarios. Casi la mitad de esta necesidad de importación proviene de los países de Oriente Medio, aunque Rusia es el mayor proveedor de petróleo crudo de China. Irak es la tercera fuente de petróleo de China, después de Rusia y Arabia Saudita. Como resultado, el volumen comercial entre los dos países ha alcanzado los 50 mil millones de dólares y, según el embajador iraquí en Beijing, Shoresh Khalid, se espera que este volumen supere 55 mil millones de dólares Al final de este año. Por lo tanto, Irak se ha convertido en un país altamente estratégico en el Medio Oriente, donde China busca maximizar los intereses económicos mutuos.
En lugar de establecer una presencia militar en Medio Oriente, China está siguiendo una política de ampliar los contactos diplomáticos y aumentar su influencia, principalmente a través de inversiones en la Iniciativa de la Franja y la Ruta. En palabras del Ministro de Asuntos Exteriores chinoel objetivo es preservar los intereses mutuos sin interferir en los asuntos internos de los países. En las relaciones con Irak, se están haciendo esfuerzos para garantizar que los conflictos y crisis regionales no afecten los intereses económicos compartidos, que se centran en gran medida en el petróleo.
Irak necesita preservar su comercio petrolero, especialmente con China. Actualmente, el 35 por ciento del petróleo iraquí es importado por Chinaque importa alrededor de 1,2 millones de barriles de petróleo crudo de Irak diariamente.
El hecho de que las empresas chinas hayan ganado la mayoría de los contratos en las recientes adjudicaciones de licencias de exploración de petróleo y gas en Irak lleva las relaciones entre China e Irak más allá de la mera compra y venta de petróleo. China, que ya era uno de los principales operadores de yacimientos de petróleo y gas en Irak, ha ganado los derechos para explotar 10 más campos de petróleo y gas en las recientes licitaciones de licencia. El Ministro de Petróleo iraquí, Hayan Abdulghani, enfatizó que los acuerdos aumentarán las reservas probadas de petróleo de Irak a 160 mil millones de barriles. Aparte de estas nuevas adjudicaciones, China Petroleum and Chemical Corp (Sinopec para abreviar) es el operador líder de otros cuatro importantes yacimientos petrolíferos en Irak.
El dominio de China en el sector energético de Irak crea una interdependencia política entre los dos países. El hecho de que las empresas chinas sean los principales operadores de la mayoría de los campos en Irak impacta significativamente la cantidad de producción petrolera de Irak y, por lo tanto, los ingresos petroleros que constituyen más del 90 por ciento de su economía.
Más de 20 empresas, incluidos grupos europeos, árabes e iraquíes, precalificaron para la licitación de licencia. Sin embargo, fue China quien surgió como el mayor licenciatario extranjero, ganando la licitación para 10 yacimientos de petróleo y gas. El hecho de que las empresas europeas permanecieran en un segundo plano y Estados Unidos no participara en absoluto en la licitación es una clara indicación de la dinámica cambiante en la energía global. Por ejemplo, Exxon Mobil se retiró del oeste de Qurna proyecto de campo petrolero en Irak en febrero de este año y transfirió sus actividades operativas a PetroChina, destacando aún más este cambio.
Irak, el país con el cuarta mayor reserva de petróleo en la OPEP, quema el gas asociado extraído junto con el petróleo de los yacimientos petrolíferos. Irak no puede utilizar el gas debido a la destrucción de infraestructura y a tuberías inadecuadas como resultado de guerras y ataques terroristas. Por esta razón, Irak importa una cantidad significativa de gas natural de Irán para su uso en centrales eléctricas cercanas a Bagdad.
Se esperaba que Estados Unidos participara en esta ronda de licitaciones para evitar la dependencia de Irak del gas iraní. Incluso se informó que este tema fue discutido durante la reciente visita del Primer Ministro iraquí Mohammed Sudani a Estados Unidos. En reuniones anteriores con la parte estadounidense, Sudani también había trató de alentar Las empresas estadounidenses invertirán en los yacimientos de petróleo y gas de Irak.
En los últimos años, Estados Unidos ha tratado de encontrar una solución al problema del gas desperdiciado en Irak no a través de sus propias empresas sino presentando empresas pertenecientes a los países del Golfo. En este contexto, países como Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos han acelerado sus contactos con la parte iraquí, y estos contactos se han concretado con algunos acuerdos. Por tanto, lo sorprendente es que los países árabes se hayan quedado rezagados con respecto a China en estas licitaciones de licencias.
El hecho de que las empresas chinas hayan mostrado una determinación precisa ante el capital del Golfo y hayan obtenido las licencias de estos yacimientos de petróleo y gas es fundamental para mostrar la importancia de China en la política petrolera en Irak. Hoy, China es el comprador de casi la mitad del petróleo iraquí y el principal operador de los yacimientos petrolíferos que se están explotando para que Iraq pueda producir petróleo cada vez más eficientemente. Las autoridades chinas quieren convertir la cuestión energética en una piedra angular indispensable de la interdependencia entre China e Irak.