Descifrando el verdadero potencial de inteligencia artificial de Taiwán – The Diplomat
A medida que se desarrolla la revolución mundial de la inteligencia artificial (IA), Taiwán se encuentra desempeñando un papel crucial en la configuración del futuro de esta tecnología transformadora, en particular su dominio en el mercado mundial de chips de IA. Esta prominencia se mostró en la reciente exposición Computex 2024 en Taipei, donde gigantes de la industria como Nvidia, AMD, Intel y Qualcomm vinieron a la isla para presentar sus últimas soluciones de IA.
Cobertura por cnn y El guardián informó que el CEO de Nvidia, Jensen Huang, se refirió a Taiwán como «el hogar de nuestros preciados socios» y el punto de inicio de todas las iniciativas de Nvidia.
De hecho, Taiwán ha participado activamente en acercarse a los fabricantes de chips de IA, incluso a través de enmiendas de 2023 a la Estatuto de la Innovación Industrial. La reforma permite a los fabricantes de chips reclamar una deducción fiscal del 25 por ciento sobre investigación y desarrollo de chips avanzados, junto con una deducción del 5 por ciento por compras de equipos de fabricación avanzados.
Sin embargo, a pesar de sus importantes contribuciones al ecosistema global de IA, Taiwán a menudo tiene dificultades para representarse con precisión en las evaluaciones globales de organizaciones internacionales como las Naciones Unidas.
La ironía es cruda: a pesar de la falta de datos globales sobre el desempeño de la IA de Taiwán, la industria de semiconductores de la isla, liderada por el campeón nacional TSMC, es la columna vertebral de la infraestructura global de IA. El economista Recientemente se informó que la isla produce más del 90 por ciento de los semiconductores más avanzados para las aplicaciones e investigaciones de inteligencia artificial más vanguardistas del mundo.
Las contribuciones de Taiwán a la industria mundial de la IA van más allá de la producción de circuitos integrados (CI). El país también ha dado un giro hacia la producción de soluciones completas de hardware de IA. A partir de 2024, según el Ministerio de Asuntos Económicos (MOEA), los fabricantes taiwaneses suministrarán más del 90 por ciento de los servidores de IA en todo el mundo, y todas las principales marcas estadounidenses dependen de fuentes taiwanesas para sus necesidades de servidores de IA.
En gran parte debido a su condición única de “no Estado”, Taiwán suele ser ignorado en las bases de datos globales proporcionadas por las Naciones Unidas. Esta ausencia abarca varias áreas críticas. La ONU Comercio y Desarrollo (UNCTAD) omite a Taiwán en sus evaluaciones de la legislación sobre protección de datos y privacidad. El Instituto de Estadística de la UNESCO (UIS) pasa por alto a Taiwán al calcular el gasto en investigación y desarrollo en relación con el PIB. De manera similar, la Encuesta de Gobierno Electrónico de la ONU excluye a Taiwán de sus evaluaciones de servicios gubernamentales en línea.
Estas lagunas de datos en múltiples fuentes de la ONU son importantes para evaluar el potencial de desarrollo de la IA de Taiwán. Taiwán es particularmente vulnerable a los informes indexados basados en bases de datos de la ONU. Esto quedó ilustrado en el Índice de preparación para la inteligencia artificial en el gobierno 2023 publicado por Oxford Insights, que señaló que más del 40 por ciento de los datos sobre Taiwán son imputados (lo que significa que tuvieron que ser sustituidos por otras fuentes o estimaciones).
Esta falta de datos afecta significativamente la posición de Taiwán en dichos índices. Por ejemplo, el informe de Oxford Insights destaca una importante deficiencia en la preparación de Taiwán para la IA en lo que respecta a la legislación sobre privacidad y protección de datos. En esta subcategoría específica, China ocupa el primer puesto, mientras que Taiwán se sitúa cerca del final, en el puesto 140.
Pero un examen más detenido del panorama regulatorio interno de Taiwán indica lo contrario. Taiwán tiene una amplia Ley de Protección de Datos Personales (PDPA)La PDPA, que se promulgó por primera vez en 1995 y ha sufrido varias modificaciones, aunque todavía queda margen para perfeccionarla, delinea claramente los requisitos para la recopilación, el procesamiento y el uso de datos personales por parte de organismos gubernamentales y organizaciones no gubernamentales.
Entonces, ¿por qué Taiwán obtuvo una puntuación tan baja en esta subcategoría? Por falta de datos relevantes. Esto subraya las implicaciones de la omisión de Taiwán de las bases de datos de la ONU y las lagunas de datos resultantes.
La omisión sistemática de los datos de Taiwán de los índices y bases de datos globales es una forma de injusticia en los datos que distorsiona la representación tanto de sus desafíos como de sus logros. Esta injusticia tiene consecuencias de largo alcance, ya que obstaculiza la capacidad de Taiwán para participar en el discurso global y la toma de decisiones sobre cuestiones cruciales.
Otro ejemplo es la exclusión de Taiwán de la Organización Mundial de la Salud (OMS) durante la pandemia de COVID-19. A pesar de su gestión ejemplar de la crisisTaiwán no pudo compartir sus experiencias y conocimientos con la comunidad mundial a través de la plataforma de la OMS. Este aislamiento en materia de salud pública no solo privó a otras naciones de información valiosa, sino que también restringió el acceso de Taiwán a información y recursos oportunos, lo que potencialmente puso en peligro el bienestar de sus más de 23 millones de ciudadanos.
De manera similar, en el contexto del desarrollo de la IA, la falta de datos precisos y completos sobre las capacidades y contribuciones de Taiwán puede llevar a una comprensión sesgada del panorama global de la IA. Como fuerza fundamental en la cadena de suministro de la IA, la exclusión de Taiwán de las evaluaciones globales puede resultar en la pérdida de oportunidades de colaboración, intercambio de conocimientos y toma de decisiones inclusivas sobre el futuro de la IA.