¿Pueden los modelos basados en citas reducir el costo total de la atención? – Economista de la salud
El manejo de múltiples medicamentos es un desafío para muchas personas, en particular los ancianos. Un estudio realizado por Almodóvar y otros (2019) Se encontró que entre los beneficiarios de Medicare elegibles para el manejo de la terapia con medicamentos (MTM), el 51% había usado 11 o más medicamentos.
Un enfoque para mejorar la gestión de la medicación es utilizar un modelo basado en citas (ABM) y otras formas de sincronización de la medicación.
¿Qué es la sincronización de la medicación? Luder y otros (2024) escribir:
Una intervención para evitar la falta de adherencia consiste en mejorar la comodidad simplificando los pasos para obtener y gestionar múltiples medicamentos. La sincronización de medicamentos coordina las recargas para que todos los medicamentos se puedan recoger al mismo tiempo. Un metanálisis determinó que los pacientes con medicación sincronizada tenían 2,3 veces más probabilidades de adherencia (IC del 95 % = 1,99-2,64) que los que recibían la atención habitual. [Nsiah et al. 2021]4 En concreto, el modelo basado en citas (ABM) tuvo el mayor efecto sobre la adherencia (odds ratio 3,1; IC del 95 % = 2,72-3,63) en comparación con las llamadas telefónicas de recordatorio, las recargas automáticas y otros tipos de programas no basados en ABM.
Si bien el ABM puede mejorar la adherencia a la medicación, otra pregunta es si ahorra dinero. Luder y sus coautores descubrieron que sí lo hace.
Durante el período de seguimiento, la mediana de PPPM [per patient per month] TCOC [total cost of care] para el grupo ABM fue de $656 y de $723 para el grupo de control (PAG = 0,011). Los costos de farmacia medianos también fueron significativamente menores en el grupo ABM ($161 frente a $193, PAG < 0,001), mientras que los costes médicos medios fueron de 328 dólares en el grupo ABM y de 358 dólares entre los controles (PAG = 0,254). Más pacientes del grupo ABM fueron adherentes durante el seguimiento, con un 84% logrando un PDC de al menos el 80% frente al 82% entre los controles (PAG = 0,009).
Es interesante que, aunque aumentó la adherencia, el costo de la farmacia disminuyó. Los autores plantean la hipótesis de que esto podría haber ocurrido debido a la interrupción más frecuente de medicamentos innecesarios o redundantes, la reducción de las dosis de los medicamentos a dosis supraterapéuticas o el cambio a alternativas terapéuticas menos costosas (por ejemplo, genéricos, biosimilares). Sin embargo, los autores no tienen datos para probar empíricamente qué vías específicas tuvieron el mayor impacto en el costo.
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