Cómo una cárcel rural del condado de Maine ayudó a los presos a mitigar sus antojos de opioides

Un alguacil luchó para que a los presos adictos a los opioides se les administrara una inyección que suprimiera los antojos durante un mes. Al ser liberados, tenían más probabilidades de continuar el tratamiento.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *